Un chico.
Una chica.
Ella se dirige a la puerta de salida.
Andar elegante.
Tacones negros.
Piernas de vértigo.
Vestido que no cubre su espalda.
Bella espalda la suya.
Pelo alborotado.
Abre la puerta con carácter.
Su mano se bloquea en el mango de la puerta.
Y es que no es para menos.
En su estilizada cintura ha notado
el rodeo del brazo de él.
Un brazo
con personalidad
con decisión
con sentimiento
con deseo
con morbo
con un verbo incorporado...
..."Quédate"...
De la boca de ella
sale un espasmo.
Sin duda
el Mejor Espasmo.
Él le ha agarrado
de tal manera
que sus piernas ya no tocan el suelo.
Por una vez
la chica no ha pisado tierra firme.
Un "Espasmo volador".
El Mejor Espasmo.
Escrito por María del Río.
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