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viernes, 9 de abril de 2010

Mi querido Simón

Todavía

me acuerdo

aquel momento

que me enamoré de él.

Ese momento

me lo reservo

si me lo permitís.

Sólo os digo

que no me lo regalaron en Navidad.

Y qué bien que fuera así.

Me lo regalaron un día inesperado.

Como a mí me gusta.

No sólo me enamoré yo.

Mi hermano también.

Y es que las tardes

que pasábamos con él

eran increíbles.

Ojalá

quedarán

juegos así ahora.

Lo seguimos teniendo.

Y quizás

algún día

rememoremos

una tarde de esas.

Seguro que sí.

Nostalgia?

Pues sí.

Es lo que tiene

el paso de los años.

Escrito por María del Río.

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