pero no se levantaba.
Llevaba tiempo
inmovilizada.
Es lo que tiene
que te pongan
el corazón
en el congelador
más potente
del Planeta.
Menudo frío
pasaba ella.
Por fuera
y por dentro.
Una frialdad absoluta.
Padecía el Síndrome de Allison.
Estaba paralizada.
Y asustada.
Y es que este síndrome
también es llamado
"Enfermedad de los Astronautas".
Y bueno...
ella siempre ha sido
peculiar y especial.
Pero no era necesario
exponerle a ese estado.
Afortunadamente
asumió
que estar paralizada
no se lo merecía.
Y ahora me han comentado
que está bajo otro Síndrome.
El "Síndrome del Disfrute".
No existe literalmente
este Síndrome
pero ella es creativa
por excelencia.
Y es que se lo merece
desde hace tiempo.
Siempre se lo ha merecido
pero el estar paralizada
le dejó
sin coherencia alguna.
Ahora
se asusta pero de otra manera.
Tiene sustos gratificantes.
Escrito por María del Río.
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