Llamar
a tu hijo "Futuro"
no tiene
perdón de Dios.
Aunque bueno
que más dará
obtener
el perdón
de semejante
figura.
En fin...
a lo que iba.
Que me disperso.
Cuando nació
ya sabía
que había nacido
desde hacia dos años.
Su primer beso
ya lo habia saboreado.
Su primer cigarro
ya conocía
sus labios.
Su primer dolor
del corazón
ya le había
provocado
bombeos
espasmódicos.
El aire
ya lo había cogido
unas cuantas veces.
Y todo
porque le llamaron
"Futuro".
Pero hay un matiz
en todo esto.
Que la que escribe
estas líneas
se llama
"Pasado".
Y tampoco
tiene perdón
de Dios.
Escrito por María del Río.
jueves, 24 de junio de 2010
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bello relato, bella tu!
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