que le gustaban los Puzzles.
Pero le gustaba
hacer los suyos Propios.
Su cabecita
siempre
rebosaba creatividad.
Nadie lo dudaba.
Ella creaba sus piezas.
Pero no eran de cartón.
Eran piezas teatrales.
Cada una de ellas
las tomaba con compromiso
y con un desparpajo único.
Eran piezas
con fuerza
y las mimaba
con Amor.
Amor genuino.
Con ese sentimiento
hacía
que todas las piezas
encajaran y fluyeran.
Y es que
nunca desesperaba
ni tenía desazón.
Han pasado unos años
y ella
no ha cambiado.
Sigue encajando Piezas
de la mejor manera
y a su manera.
Con Paciencia
Con Elegancia
Con Chispa
y
ante todo
en el Mejor Tablero.
El Tablero de su Vida.
Es un Puzzle Diferente.
Porque es sobre la Vida
y
porque ella sabe interpretarla
con las mejores fichas.
Ella
es capaz de movilizar
a todo el mundo
para que el Arte en sí mismo
siga hacia adelante.
Y es que ella ama lo que hace.
Es un gran Puzzle.
Un Puzzle Diferente.
Un Puzzle llamado "Carmen Ruiz"
que ni se compra ni se vende.
Escrito por María del Río.
Photo by María Castañar Muraday.
