Sé lo que quieres. Matarme. Házlo. No te cortes.
Pero te ruego que me
dejes colaborar en todo el proceso.
Primero muérdeme los labios.
Luego
distánciate.
Y finalmente, mátame.
Pero a besos por favor.
Escrito por María del Río.
domingo, 7 de junio de 2015
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario