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sábado, 1 de enero de 2011

Un Domingo No Cualquiera

Sí.
Era Domingo.
Pero no uno cualquiera.
Él había amanecido
con una silueta de escándalo
a su lado.
La noche anterior
hubo adrenalina
encima de un escenario.
La culpa la tuvo él.
Y su rizado pelo.
Después hubo amor
y no pantomima.
El amor duró
hasta el Domingo
por la tarde.
La silueta
que le había acompañado
era "ArchiNémesis".
No contaba con ello.
Y es que amanecer
con la Diosa de la Venganza
no es agradable para nadie.
Pero ella no pudo con él.
Por muy Diosa que fuera.
Él no se vengó.
Demasiado previsible para ella.
Sino que le susurró al oído
la letra de un tema suyo
llamado
"Un Domingo Cualquiera".
Y la encandiló por completo
convirtiéndola en la
Diosa Venus.
Escrito por María del Río.

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